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El SER UNO
CARTA ABIERTA A EL SER UNO…
No entiendo cómo controlar mis emociones de impotencia cuando veo en las noticias todo lo que está pasando en el mundo.
Me siento imposibilitado como todos y no puedo controlar mis emociones de furia y rabia.
¿Qué debo hacer, cerrar los ojos, controlarme y vivir mi vida alegre positiva y hacer de cuenta que no está pasando nada?
¿Qué va a suceder con el resto de la humanidad?
¿Por qué me siento así?
A veces me gustaría desaparecer a todos los gobernantes corruptos, negligentes y con visos de locura...
¿Qué debemos hacer? Gracias… Oscar.
RESPUESTA: Estimado Oscar…
Comprendemos sus sentimientos, porque todos los seres de “Bien” sentimos algo parecido y nos unimos en nuestro sentir, unos más y otros menos.
Miramos el mundo como espectadores y muchas veces lo vemos equilibrado, a veces lo percibimos completamente loco y otras experimentaremos hermosos sueños o terribles pesadillas.
Nos preguntamos: ¿Qué hacemos en este mundo?
¿Por qué nos tocó nacer en el?
... Una excelente pregunta que todos deberíamos hacernos a nosotros mismos.
Pero no es así, la mayoría de los seres nacen, viven, procrean y desencarnan sin ni siquiera haberse hecho la pregunta clave:
¿Quién soy, de dónde vengo y hacia dónde voy?...
La realidad álmica de este mundo está clasificada en el universo como: ENSUEÑO Y FANTASÍA.
Las Energía-pensamientos de la gran mayoría de los seres-humanos del planeta Tierra son neuronas de la Mente Universal y están ubicados en el Sub-Consciente de esta inimaginable Mente Cósmica, desgraciadamente aún no se encuentran ubicados en su Consciente.
Por esta razón las almas encarnadas en las formas-hombres duermen y sueñan creando en esos sueños irrealidades que pueden ser experiencias bellas, elevadas y glorificadas o pueden ser experiencias horribles, densas y distorsionadas…
La mayoría de las almas del planeta “Duermen” el sueño de su inconsciencia, ignorancia, atraso y oscurantismo.
Los pocos seres que están “Despiertos” ven y son conscientes de su realidad, tratan por todos los medios de despertar a los dormidos, pero ellos no quieren, no desean despertar porque eso les significa que deberán tener “CONSCIENCIA” y eso les demanda una gran responsabilidad, cambios, renuncias, orden, voluntad, constancia y mucho, mucho trabajo.
Es más agradable y placentero seguir soñando y viviendo en la fantasía complaciendo al Ego y a los Sentidos Externos.
Es más fácil obtener los beneficios inmediatos y disfrutar de ellos, sin importar cómo se logran, robando, engañando, mintiendo, asesinando, estafando, prostituyendo su cuerpo y alma o creando fantasías negativas que adulteran lo derecho y correcto.
Aunque pensemos que esta realidad es negativa, enferma, cruel, nefasta, corrupta, degenerada, prostituida y más…
Las almas de los Seres-Humanos vamos hacia adelante.
No lo podemos percibir porque la comunicación en los medios periodísticos se encarga de transmitirnos y hacernos ver todo lo negativo, ¿Por qué? porque eso es lo que se vende, lo que atrae y produce dinero.
Vemos la distorsión en películas de sado-masoquismo que la exaltan como una gran obra cinematográfica, haciéndonos creer que eso es el amor maravilloso entre dos adolescentes.
Sí, lo vemos porque es lo que nos muestran, sin embargo hay mucho trabajo positivo de seres que realmente trabajan para el bien de la comunidad y luchan fervorosamente para que este mundo mejore y que nuestras generaciones posteriores puedan disfrutar de un planeta LIBRE lleno de LUZ y AMOR.
No perdamos la creencia, ni dejemos que pensamientos de furia y rabia nos embarguen, trabajemos primeramente con nosotros mismos, con nuestro entorno y con el planeta solo así legaremos a nuestras generaciones lo mejor de lo mejor y ellos (que seremos nosotros) se encargarán de que todo se coloque en orden.
Muchas veces no entendemos el contexto general de ciertos hechos y actitudes, pero tengamos la seguridad que el universo está muy atento y siempre pone orden de una forma u otra y este orden llegará, en su momento y tiempo… No tengamos ninguna duda que así será…
Camino del Ser.
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